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Con el mar de fondo y el pueblo al frente: Santa Marta celebró como nunca antes sus 500 años

Con el mar de fondo y el pueblo al frente: Santa Marta celebró como nunca antes sus 500 años

La capital del Magdalena celebró sus 500 años de historia como nunca antes y esto fue gracias a los ingentes esfuerzos que realizó el alcalde Carlos Pinedo Cuello.

Y es que las actividades fueron mañana, tarde y noche cargadas de mucha alegría, porque se materializó una organización histórica tal como se vio reflejado en el mar de la bahía con la puesta en escena de una tarima náutica donde propios y visitantes pudieron deleitarse y disfrutar minuto a minuto la presentación de agrupaciones folclórica y artistas de talla nacional e internacional.

El desfile del pueblo y para el pueblo

Igualmente, la fiesta se trasladó a los barrios populares que serpentean la calle 30 en Santa Marta. Allí, los habitantes de los barrios aledaños, pudieron palpar de primera mano el gran derroche cultural y artístico que enmarcó esta celebración.

"Vivo en primero de mayo y siento que este desfile marcó la historia de santa marta porque es primera vez que por acá por estos barrios tenemos la oportunidad de presenciar semejante espectáculo" dijo Andrés Martínez, habitante de Santa Marta.

De la misma manera,la señora Adriana Páez,quien lleva viviendo más de tres décadas en el barrio María Eugenia sostuvo que " tengo 67 años de edad y en lo que llevo de vida nunca antes había visto semejante festividad de la manera como lo organizó Pinedo en Santa Marta.

Un canto inigualable pero que no fue voluntario

Lo que muchos no saben es que la presencia de Carlos Vives en este evento no fue un homenaje voluntario a su ciudad natal, sino una contratación formal por un valor cercano a los $3 mil millones de pesos, como cualquier artista de su categoría.

Gracias a esta gestión, Santa Marta no solo celebró su historia, sino que mostró al país y al mundo que se puede hacer unas fiestas que magnifique la cultura y la historia de Latinoamérica conservando las raíces de un pueblo que añora seguir desarrollándose y evolucionando en el trasegar de los años.